CADA EMOCION TIENE SU ESPACIO

Vivimos en una sociedad donde todos deseamos tener éxito, vernos hermosos, saludables e inclusive ser famosos. Si no tienes estas cualidades lo más probables en que no correspondas al canon de tu entorno, no te sientas satisfecho y para encajar simules una alegría, satisfacción y bienestar que está muy lejos de lo que realmente estas experimentando…

Emociones como la rabia, no es muy bien vista en esta sociedad donde nos enseñaron a tolerar el irrespeto … emociones como la tristeza no tiene cabida en un entorno donde constantemente estamos bombardeados con frases hechas de “sé feliz”, sentir desagrado, insatisfacción o miedo es algo que llevas adentro sin muchas opción para expresar y lo peor que puedes experimentar que tus emociones estén tan camuflageadas, ignoradas y sepultadas que llegues a sentirte confundido en no saber que sientes ni como expresar lo que sientes.

A pesar de que la tristeza es una emoción de baja energía, es necesaria su expresión, permitirnos sentir nuestra tristeza, que tenga un espacio en nuestra vida, nos ayuda a contactarnos a nosotros mismos, mantener nuestras líneas abiertas para un dialogo interno y sincero, sin camuflajes, ni mentiras, permitir que nuestras lagrimas broten y limpien literalmente situaciones de dolor que están en nuestro interior a veces atascadas y sin poder salir, que a la larga, nos acoraza, nos enferma y limita nuestro contacto interno (y externo).

La rabia que reservamos, que escondemos por eso de ser “chicos buenos”, nos lleva a contraer nuestros músculos para limitar el movimiento que por energía natural desea salir. La rabia también debe tener su espacio de expresión, pataleta, gritos, movimientos de nuestros brazos y puños, nos permiten autorregularnos, hacer contacto y tomar responsabilidad.

El Miedo nos inmoviliza, nos tensa, amarra nuestro cuerpo, el miedo no nos permite avanzar, mover nuestras piernas y pies, estirar nuestros brazos, para alcanzar lo que deseamos, cierra nuestra garganta para contener nuestra expresión, el miedo nos quita la energía y debilita nuestro cuerpo.

Las emociones nos permiten hacer contacto con nosotros mismos, y a pesar de que a veces no sabemos cómo dejarlas fluir, todas deben tener espacio en nuestra vida.

Cuando una emoción o varias de ellas no pueden ser expresadas, se produce una tensión muscular localizada que se cronifica y “se lleva puesta” como una actitud de vida, como una coraza o armadura que pasa a ser nuestra segunda piel.

La Terapia Psicocorporal nos brinda herramientas para descubrirlas, contactarlas y expresarlas y hacernos responsables de ellas, para accionar de acuerdo a nuestras necesidades.

La Psicoterapia Corporal abre la posibilidad para sensibilizarnos y reconocer que estamos sintiendo, para la expresión desde la palabra y desde el cuerpo, liberando nuestras tensiones, y para la integración de esa emocionalidad permitiéndonos, volver a experimentar la vitalidad, la vibración y ese estado de armonía en donde todas nuestras emociones tienen su espacio e importancia.

Uno de los objetivos de la Psicoterapia Corporal es resquebrajar lo que Reich llamó la “armadura del carácter” para poder liberar así las tensiones que anudan nuestras emociones y la libre expresión del cuerpo.

Expresar las emociones adecuadamente, te permite liberar las tensiones musculares, los dolores corporales y hacerte más flexible, ampliando tu respiración para abrirte a lo nuevo y vivenciar todas las experiencias.

Si deseas trabajar tus procesos personales conocerte más, elevar tu autoestima, liberar tus tensiones y estar en más armonía contigo mismo y con el entorno te invito a experimentar estas maravillosas técnicas.

Escrito por Zullymar Guerrero
Psicoterapia Corporal y Gestalt


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zullymar@hotmail.com
www.terapiasmentecuerpoalma.blogspot.com
Sesiones de Psicoterapia Corporal y Gestalt

LOS SINTOMAS DEL ESTRES Y LA PSICOTERAPIA CORPORAL

Estamos inmersos en una sociedad donde lo que abundan son síntomas de estrés, miedo y violencia, y son pocos los momentos de tranquilidad.

Esto provoca que nuestro cuerpo sea algo lejano y desconocido a nosotros; no lo escuchamos cuando nos pide que paremos, le hacemos caso sólo cuando nos enfermamos, como lo explica la Psicoterapia Corporal.

Cada una de las situaciones negativas nos produce estrés, y los síntomas detonan en nuestro cuerpo un estado de tensión, que normalmente desaparece cuando esta emoción es liberada.

En este sentido la psicoterapia corporal nos ayuda a adquirir tranquilidad, vitalidad y bienestar emocional que se ven afectado por los síntomas del estrés.

De acuerdo con el Centro de Psicoterapia Corporal de Granada, España, esta técnica es un acercamiento humano hacia tus limitaciones, síntomas y bloqueos actuales, y tus potenciales de auto-sanación y crecimiento:

“Es la posibilidad de recobrar la vitalidad del cuerpo a través de movimiento, masajes, estiramientos, respiración, etc.”

La psicoterapia corporal se basa en la idea de que el cuerpo y la psique-alma no están separados, sino que forman una unidad. Así se explica también la relación entre los estados psíquicos (por ejemplo, el miedo, el estrés o estados parecidos) y los estados de salud (sudoración, sentimiento de opresión en el pecho o respiración corta, etc.).
Psicoterapia corporal vs síntomas de estrés
Por: J. Manuel Reyes Tomado de Bienestar 180

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